Lo maravilloso de mirarnos a los ojos, besarnos en la boca y acariciarnos las manos no está en la sincronía, sino en la simultánea reciprocidad. Tengo (tenemos) las arterias llenas de sueños por cumplir. Somos la definición de canibalismo.
Voy a volver a comerte todos los lunares, no voy a dejarme ni uno.
Voy a volver a comerte todos los lunares, no voy a dejarme ni uno.
(realmente,
ResponderEliminares una entrada muy pero que muy bonita, sí)
nutella caliente
con nata
para mañana...más
ResponderEliminarYo pagaría por que me dijeran esas cosas tan bonitas. He muerto de amor.
ResponderEliminarBesos!
100º se me hacen muy poco para la pasion y el deseo que desprenden tus palabras.
ResponderEliminarUn placer descubrir tu blog.
Besos.
Lunna.
(es maravilloso encontrar a alguien que juegue en el mismo equipo)
ResponderEliminarmuá.
Me encanta esa idea de comer los lunares, uno a uno. Saboreando cada mordisco, cada gota de sudor. Todo. Mmmm...
ResponderEliminarVeo que sigues con tu genialidad. Haces sentir lo que escribes. No me recordarás, no lo creo vaya. Te leo pronto, espero.
Un beso, muy frío.